viernes, 30 de octubre de 2015

Solomillo al Coñac

 

“Cochino matado, invierno solucionado”

            Si sustituimos el coñac de esta receta por whisky, tendremos el popular “solomillo al whisky”, receta tradicional del tapeo que vemos en tantos bares.
            El coñac es un licor muy utilizado en cocina. A mi me gusta añadirlo a los sofritos de algunas recetas y flambearlo. Por ejemplo, va muy bien con los mariscos. Aporta un toque sabroso a las elaboraciones.

Ingredientes:
-         1 pieza de solomillo de cerdo
-         150 ml. de coñac
-         300 ml. de caldo de pollo
-         4 ajos
-         1 nuez de mantequilla
-         ½ cucharadita pequeña de comino
-         Pimienta negra
-         Sal
-         Aceite de oliva v.e.
-         Zumo de medio limón
-         2 ramitas de perejil
-         1 cucharadita colmada de maicena.



Elaboración:
            Trocear el solomillo en trozos gruesos, como centímetro y medio. Salpimentarlos.
            En una sartén donde quepan justo todos los trozos, añadir un poco de aceite y marcarlos a fuego vivo por ambos lados para señarlos bien. No freírlos demasiado. Reservarlos en un plato.
            En la misma sartén, añadir un poco de aceite más si es necesario. Cortar los ajos en dos mitades a lo largo y sin pelarlos. Saltearlos bien.
            Añadir el coñac y cocinarlo hasta evaporar el alcohol. Añadir el caldo de pollo y una vez empiece a hervir, incorporar los trozos de solomillo y cocinarlos 5 mt a fuego medio bajo.
            Una vez hechos los solomillos, volver a sacarlos y reservarlos.
            En el caldo, incorporar el perejil, comino y mantequilla. Dar unas vueltas y añadir la maicena disuelta un poco de agua. Subir el fuego y reducir la salsa hasta el punto deseado, en la que debe haber mermado bastante la cantidad de líquido y haber espesado un poco.
            Volver a colocar los trozos de solomillo, cocinarlos hasta recuperar la temperatura optima.
            Servir.

Notas:
            Como podéis ver no he añadido sal alguna, pues la reducción del coñac, el caldo de pollo y la añadida al solomillo, aportaran la cantidad suficiente. En cualquier caso, al final podemos probar la salsa y rectificar.
            Hay que tratar de cocinar el solomillo lo justo para que quede jugoso y sonrosado por dentro.

            Evidentemente, si utilizamos un solomillo ibérico, el resultado será mejor, aunque con el normal ya queda espectacular.

 
 

martes, 27 de octubre de 2015

Zumo de Granada, Manzana y Zanahoria


"Granada madura, tentación segura"

            Bueno, pues como todos los años en estas fechas, mi frutero, y no se como, se llena de granadas. No es que no me gusten, pero tampoco es el santo de mi devoción. Sin embargo, las granadas en este zumo quedan realmente bien.
            Esta de moda elaborar zumos mezclando frutas con hortalizas y verduras. Son muchas las mezclas que quedan realmente bien, pero como suele ocurrir con las modas, también se ven combinaciones imposibles con empeño de llevarlas a la excelencia en este tipo de elaboraciones. En fin, cuestión de gustos al fin y al cabo.
            La zanahoria es la hortaliza que mas me gusta añadir a mis zumos.

Ingredientes para dos bebidas.
-         2 granadas
-         3 manzanas
-         2 zanahorias
-         1 cucharadita de cardamomo en polvo



Elaboración:
            Desgranar la granada y reservarla.
            Licuar la manzana con su piel y las zanahorias peladas.
            Añadir la granada y el zumo al recipiente de la batidora de mano. Batir bien y pasar por un colador desechando los hollejos y semillas.
            Verter en un vaso y añadir a la superficie una cucharadita de cardamomo.

            Servir.

martes, 6 de octubre de 2015

Pastel de Calabaza. Pumpkin Pie.

 

“Calabaza fría, pedo todo el día”

            La creencia popular sitúa el origen de esta receta en Estados Unidos, donde es súper famosa y tradicionalmente, se degusta el día de acción de gracia.
            Es fácil encontrar allí, incluso la mezcla de especias preparadas para elaborar la receta: clavo, canela, nuez moscada y jengibre. Además, ya también se utiliza esta mezcla para otras recetas.
            La verdad es que de todos los pasteles y tartas que he comido, éste es de los que mas me gusta. De sabor equilibrado, suave y jugoso, cave destacar también su textura tan delicada y cremosa.

Ingredientes:
-         750 gr. de calabaza cruda y con la piel ó 500 gr. ya asada.
-         200 ml. de nata de cocinar
-         150 gr. de leche entera
-         3 huevos
-         1 vainilla
-         160 gr. de azúcar morena
-         2 cucharadas de postre de nuez moscada molida
-         2 cucharadas de postre de clavo molido
-         2,5 cucharadas de postre de jengibre molido
-         4 cucharadas de postre de canela molida
-         ¾ de paquete de galletas maria
-         120 gr. aprox. de mantequilla
-         Sal



Elaboración:
            Cortar en trozos la calabaza y meter en el horno a 180º hasta que este asada y tierna.
            Calentar la leche con la vainilla dentro, hasta justo el punto antes de que empiece a hervir. Apartar y dejar infusionar 30 mt.
            Mientras, hacer la mezcla de todas las especias. Solo nos harán falta 3 gramos, el resto guardarlo en un botecito para posteriores elaboraciones.
            Hagamos la base. Para ello, triturar bien las galletas con la picadora. Verter la galleta en un plato o bol y colocar encima los trozos de mantequilla con sal. Meter en el microondas a baja potencia hasta derretir la mantequilla. Mezclar bien hasta conseguir una pasta con consistencia suficiente para forrar el molde desmontable con ella.
            Abrir las vainillas y con la punta de un cuchillo, raspar y sacar toda la esencia de la vainilla. Añadirla a la leche y remover bien.
            Sacar toda la pulpa de la calabaza y meter en el vaso batidor. Añadir la nata, leche, huevos, azúcar, 3-4 gramos de la mezcla de especias y un poco de sal. Triturar muy bien.
            Reservar un ratito. Pasado este tiempo, quitar el sobrante de espuma que haya quedado en la parte superior del relleno.
            Verter sobre el molde y meter unos 45 mt. al horno precalentado a 180º. Resistencia arriba y abajo. Desde los 35 mt, ir pinchando, de vez en cuando, con un palillo de madera para ver si esta hecho el pastel.
            Terminado el pastel, dejar enfriar y después enfriar en el frigorífico.
            Servir.

Notas:
            Los 750 gramos de calabaza en bruto, quedaran en unos 500 gr. después de desechar la piel y también por la perdida de agua del asado.
            Para la base de esta receta se usa masa quebrada, que por falta de tiempo no la hice y utilice la típica de galleta y mantequilla
            Le queda también muy bien al pastel, acompañarlo con alguna mermelada, confitura, fruta en almíbar…. Yo le puse unas fresas confitadas en vino.
            Cuando comprobemos como va el pastel con el palillo, intentar dejar abierto el horno lo menos posible para no perder mucha temperatura.
            Si utilizáis clavo entero, picar en un molinillo de café. 2 cucharadas de clavo en polvo equivalen a 3 de clavo entero.

            A mitad de la cocción, suelo poner un trozo de papel de plata por encima para evitar que coja un color demasiado tostado por arriba. Solo echarlo por encima, sin que quede bien tapado.