Entre mucha
de las propiedades de la alcachofa, hay que destacar aquellas indicadas para
las insuficiencias hepáticas. Es un gran alimento contra el colesterol y muy
depurativas.
Esta es una
forma sencilla de comer alcachofas, sin complicaciones e indicada para cuando
no tenemos ganas de complicarnos en la cocina a la hora de hacer de comer.
Ingredientes para dos:
-
4 o 6 alcachofas (según el tamaño)
-
Aceite de oliva v.e.
-
Pimienta negra
-
Sal
Elaboración:
Calentar la
plancha a fuego medio. Engrasarla con aceite.
Si las alcachofas
tienen mucho tallo, cortarle un trozo.
Si tienen
excesivas hojas exteriores, quitarle algunas.
Cortar las
alcachofas en 2. Con una puntilla, quitar la vellosidad, si la tiene, y colocarlas sobre la plancha con la parte
del corte hacia arriba.
Sobre cada
media alcachofa, añadir sal, pimienta y un buen chorreón de aceite.
Mantener
unos 20 mt. aprox. o hasta que las hojas en contacto con la plancha estén
churruscadas, momento en el que daremos la vuelta y mantendremos otros 10 mt. o
hasta que se dore también esa parte. No pasa nada si las hojas en contacto en la plancha se queman bastante, pues esas suelen desecharse.
Servir.
Notas:
Los tiempos
variaran en función del tamaño de la alcachofa, pues cuanto más grande sean,
mas tardaran en cocerse por dentro. Éstas en concreto, son muy grandes para mi
gusto, pues yo las prefiero un poco más pequeñas.
Iremos
quitando hojas y mordiendo o comiéndonos la parte mas blanda cercana al tallo.
Al final nos quedara el corazón sin hojas, que es la parte más rica.
Podemos ir
mojando la parte de la hoja a comer, en mayonesa, alioli o cualquier salsa que
nos guste.
Igualmente,
esta receta podemos hacerla en vez de a la plancha, en una barbacoa con unas
brasas no muy vivas.
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